viernes, 17 de mayo de 2013

Otro genocida prófugo





El represor Carlos Arroyo iba a ser juzgado en el segundo juicio a genocidas del Ejército que iba a comenzar en los próximos días en la ciudad. Una decisión del Juzgado Federal bahiense lo dejó excarcelado a la espera del inicio del debate oral. Desde hace diez días está prófugo. Otra lamentable actuación judicial.
La Unidad Fiscal de Derechos Humanos que dirigen los fiscales José Nebbia y Miguel Palazzi confirmó esta semana que el represor Carlos Alberto Arroyo, un coronel retirado del Ejército acusado de participar en la comisión de delitos de lesa humanidad, se dio a la fuga desde hace al menos diez días, aprovechando la excarcelación con que lo benefició el mismo Juzgado Federal 1 bahiense que denegó ayer el pedido de detención a Vicente Massot y Mario Gabrielli.
El carácter de prófugo del imputado se comprobó luego de que el 6 de mayo último no se presentó a un examen de rutina ante el Cuerpo Médico Forense de la Corte Suprema de Justicia. La inasistencia motivó la disposición de distintas medidas en pos de dar con su paradero, que hasta el momento resultaron infructuosas.
Arroyo formaba parte al momento de su fuga de la decena de imputados que debían sentarse en el banquillo de los acusados durante el próximo juicio oral por los delitos de lesa humanidad perpetrados durante la dictadura bajo jurisdicción de V Cuerpo de Ejército. 
La decisión de excarcelar al represor había sido a su vez ratificada por la Cámara Federal de Apelaciones de nuestra ciudad, pese a las sucesivas presentaciones que en sentido contrario realizó la Unidad Fiscal ahora a cargo de Nebbia y Palazzani y anteriormente bajo responsabilidad de Abel Córdoba.
El 24 de octubre pasado, por caso, tomando en cuenta la inminencia del inicio del debate oral que lo incluiría entre los acusados, la Unidad solicitó al Tribunal Oral Federal (TOF) la detención de Arroyo y de los también excarcelados represores José Héctor Fidalgo y Alejandro Lawless. El pedido fue reiterado el 21 de marzo de este año, pocos días antes de la audiencia preliminar entre las partes que se desarrolló el 16 de abril. Hasta el momento, el TOF nada ha resuelto.

Perfil del represor que huye
Durante el imperio del Terrorismo de Estado, bajo la última dictadura cívico militar, Arroyo se integró la Compañía Comando y Servicios del Comando del V Cuerpo de Ejército. Como parte del llamado “Equipo de Combate contra la Subversión”,  ha sido señalado como responsable del asesinato de la pareja formada por Daniel Hidalgo y Olga Silvia Souto Castillo, que al momento de perpetrado el hecho estaba embarazada. Ese caso es el que lo habría depositado en el banquillo de los acusados en pocos días, si no le hubieran otorgado la libertad de fugarse el Juzgado Federal 1 y la Cámara de Apelaciones.
“La Unidad Fiscal ha repetido en innumerables ocasiones la necesidad de que todos los imputados por delitos de Lesa Humanidad sean detenidos en unidades carcelarias, atento el riesgo procesal concreto y real de que se fuguen, ya que, como se ha visto en los hechos, quienes formaron parte del Estado terrorista cuentan aún hoy con la connivencia de diversos sectores de poder que protegen a este tipo de delincuentes”, dijo la Unidad Fiscal bahiense en un comunicado emitido ayer a última hora de la tarde. Arroyo tiene conocidos poderosos, que mucho hicieron por su impunidad: entre 1993 y 1998 fue parte de la custodia militar de Carlos Menem y junto a él viajó por todo el mundo.
Al cierre de esta nota se encuentran también prófugos Aldo Mario Álvarez, Ricardo Joaquín Molina y Miguel Ángel García Moreno, cuyo antecedente no sirvió para que el Poder Judicial bahiense se replantee algunas decisiones: como Arroyo ahora, García Moreno estaba excarcelado y se fugó poco antes de que diera inicio el juicio que lo tendría como acusado, a mediados de 2011.
Quien tenga datos sobre el paradero del represor Carlos Alberto ARROYO (foto, 60 años), puede aportarlos contactándose al teléfono (0291) 4566567 o la dirección de correo electrónico uavddhh-bha@mpf.gov.ar

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